Los tiempos cambian, pero el amor de Dios es tan real y necesario como siempre lo ha sido, por lo cual continuamos nuestro compromiso de llevar adelante la obra de Cristo en las comunidades de la región noroeste de Los Ángeles en colaboracion con nuestras congregaciones. Desde la ciudad de Lancaster hasta el área de Silverlake, las iglesias y Nuevas Comunidades de Adoración han encontrado formas muy creativas de brindar oportunidades significativas para la adoración y la educación cristiana.

Sin lugar a duda, puedo decir que en las últimas dos décadas, nuestras iglesias nunca se habían esforzado tanto en llegar a los que más sufren y en buscar cruzar las brechas raciales y socioeconómicas en el nombre de Jesús.

Como presbiterio, hemos trabajado arduamente para apoyar varias transiciones durante el último año:

• Ayudando a tres de nuestras congregaciones a asegurar un liderazgo pastoral a tiempo parcial.
• Uniéndonos a nuestra iglesia nacional para brindar entrenamiento y apoyo a cinco Nuevas Comunidades de Adoración que funcionan en linea, dos de ellas en español.
• Implementando un programa de pasantía pastoral de un año que ha dado como resultado la colocación de candidatos en dos de nuestras iglesias.
• Otorgando apoyo financiero a organizaciones en la region central Valle de San Fernando que ministran a las poblaciones de nuevos inmigrantes, refugiados y personas sin vivienda.
• Desarrollando estrategias para proporcionar apoyo financiero a nuestras congregaciones, incluyendo el aprovechamiento de los planteles de la iglesia para generar fondos para la mission en el futuro.

Estas, solamente constituyen algunas expresiones de lo que nosotros, como comunidad de iglesias, podemos lograr juntos. ¡Las contribuciones económicas fieles y generosas de cada una de nuestras iglesias hacen todas estas cosas posible!

Con sincera gratitud,
Rev. Juan J. Sarmiento, Presbítero Ejecutivo